Blogia
APALABRADOS

ANTES DE LEER EL JUGUETE RABIOSO, DE ROBERTO ARLT


El juguete rabioso y la inauguración de la narrativa urbana

Desde cerca de 1946, se nombra a Roberto Arlt un escritor urbano. Cuando se publicó El juguete rabioso, en 1926, no era ésta, desde luego, la primera novela argentina que tenía como espacio la ciudad de Buenos Aires. Ya había la prosa de Eugenio Cambaceres, en donde estaba presente el habla de los clubes porteños. Cerca de 1880 se editaba la novela La gran aldea de Lucio V. López, que define la Buenos Aires de los 80, presentando "las tiendas porteñas y el tendero de antaño; el baile de negros en el teatro de la alegría, una noche de carnaval; las escenas del club Progreso, los episodios de la vida comercial y política: sus tipos, ideas, leguaje( ...)". Alrededor de 1889, Manuel Podestá tenía publicada la novela Irresponsable, en donde dice el protagonista: "En esta sociedad nueva, cosmopolita, que lo va improvisando todo (...) y que no se preocupa con lo que el hombre es." Y en la misma escena, éste ve "desfilar una caravana de inmigrantes andrajosos, hambrientos, bestializados por sus miserias de origen, pero que serán más tarde señores de industria y fundadores de estirpe". Cerca de 1890, José Miró, bajo el seudónimo Julián Martel, tenía publicada su novela La bolsa, que según Julio Piquet, "es un hermoso libro, y el único documento literario que refleja con verdor un período singular de la vida bonaerense".

Pero en El juguete Rabioso el espacio, la ciudad de Buenos Aires, tendrá un papel más activo en la intriga. A fines del siglo XIX, la ciudad estaba en la novela como telón de fondo para la acción y los movimientos de los personajes ficticios. La calle, el centro y el barrio eran objeto de descripción, sin la menor correlación con la vida espiritual del personaje. En cambio, en la novela de Arlt, se advierte con claridad la interdependencia entre el personaje y la ciudad. Además, La ciudad es algo que los protagonistas viven y -desde Erdosain- sufren. Es el entorno y la contrapartida del hombre moderno. En El juguete rabioso el conflicto se caracteriza por los embates entre Silvio Astier -el protagonista- y la gran metrópolis Buenos Aires.

Ante las novelas contemporáneas a la suya, el carácter urbano resalta por contraste. En 1926, el mismo año en que se publica El juguete rabioso, surge Don Segundo Sombra, de Ricardo Güiraldes. De hecho las dos novelas tienen alguna semejanza y una gran oposición: el personaje de Arlt fracasa en todo lo que intenta y sale derrotado, mientras el de Güiraldes se vuelve un estanciero y recibe de Don Segundo los buenos ideales. El escenario de Güiraldes es el campo y su novela es un rescate de los valores del gaucho; el escenario de Arlt es la ciudad que deteriora y corroe al individuo y los valores morales y éticos.

La denominación de Arlt como un escritor urbano se da -entonces- más que por el escenario urbano, la metrópolis, por la acción de ese escenario sobre el individuo. Primero con El juguete rabioso y luego, con más profundidad, en Los siete locos. El escenario urbano no sólo como edificios y calles para localizar la acción, sino también como un compuesto de personas de esta o aquella parte de la sociedad. Así, se verá que el protagonista será explotado por el comerciante como clase, engañado por el rico con promesas de empleo, empujado hacia el crimen por el hampa e incluso atormentado por sí mismo como miembro de una clase social decadente que se ve acosado por la miseria y por la obligación de trabajar para comer y sobrevivir.

1 comentario

primo gardelito -

nada q ver con la droga eh?